(Aportacion de Pescaito)
Que difícil es a veces llegar a ciertas situaciones, sin embargo, luego nos ocurren y pasan casi inadvertidas por vivirlas dentro de la rutina diaria, y no nos damos cuenta de ellas hasta que han pasado. A veces pienso que si las cosas son tan difícileses por que nosotros las hacemos así.
De pequeño mi madre me solía mandar a jugar con mis vecinas, nos pasábamos todo el día juntos mientras nuestros padres se dedicaban a su cosas, unas veces jugaban conmigo al fútbol y otras me tocaba ir a mi a su supermercado de frutas de plástico y productos en miniatura a comprarlas cosas.
En verano nos bañábamos en su piscina y nos hacíamos todo tipo de putadas acuáticas, pero el tiempo pasa y todos crecemos, ellas con los años perdian esa inocencia que tiene el ser niño y se iban tapando, poco a poco y dejaban de jugar cuando llegaban a esa edad en la que al verse ya en desarrollo se vuelven mas pudorosas, algo normal como la vida misma y que por otro lado entendía y nunca llamo mi atención.
Un verano la madre de una de ellas, actuando como hacen muchas madres con niños de estas edades, saco a su hija de la piscina y decidió cambiar a su hija allí mismo el bañador por otro seco delante de todos sus amigos, sin inmutarse ni darle importancia a la vergüenza que mostraba su hija por que la dejara allí desnuda delante de todos, la hija intento taparse avergonzada, esto llamo mi atención, no por pensar nada obsceno, con los años que tenia yo por aquel entonces me hubiera pasado totalmente inadvertido, si no fuera por su vergüenza y su pudor en aquella situación antes normal, todo aquello que vi me hizo empezar a despertar una cierta curiosidad por el genero femenino y por todo aquello que tapamos haciéndolo mas misterioso y excitante…
Hoy en día bastantes años mas tarde he recordado esta situación charlando con una de mis compañeras de trabajo por casualidades y circunstancias de la vida:
Últimamente ando trabajando con una compañera, llevamos años trabajando juntos y somos ya como de la familia, pero ahora andamos viajando juntos de un sitio para otro, el caso es que como si fuera el argumento de una mala película, nos hemos visto envueltos en la situación de tener que alojarnos juntos en la misma habitación de Hotel por tener mal hecha la reserva de la habitación en epoca de congresos, al principio nos hemos quedado un poco cortados, pero dadas las fechas estivales en que nos encontramos y la dificultad que existe para encontrar nada, finalmente nos hemos decidido a compartir habitación.
En el fondo podíamos haber buscado otro sitio con un poco de esfuerzo y ganas, lo reconozco, pero la verdad es que a ninguno de los dos nos ha importado, y no por nada sexual, ¿por el echo entonces de compartir gastos? creo que no, seria una buena excusa, con otros compañeros lo hago, pero si tengo que ser sincero, me agradaba la idea y creo que a ella tambien.
Mientras subíamos a la habitación pense en lo morboso de aquella extraña circunstancia de la vida en que nos habíamos visto envueltos y vi en ella algo mas de lo que había visto durante tanto tiempo, y la verdad es que me excitaba la idea.
Mi compañera es algo así como el alma de la fiesta de allá donde va. En ocasiones se queda en bragas y sujetador sin ningún tipo de remilgo durante alguna que otra fiesta de esas que se nos van un poco de las manos los viernes después del curro en casa de alguien, segun ella al tener poco pecho hay poco que mirar. Muchas veces hemos estado incluso hablando de vestuario a vestuario sin puertas de por medio tapándonos solo lo que creíamos necesario tapar aprovechando las paredes que separan los mismos, incluso una vez enseñandome en su cámara las fotos de unas vacaciones pude ver por breves instantes una foto suya al sol que se quedo grabada en mi retina.
El caso es que como quien juega con fuego se quema, a nosotros nos paso en aquella ocasión, o casi.
Hoy al terminar y llegar al hotel ella se ha duchado primero cuando hemos llegado y desde la ventana de la habitación mientras fumaba, he podido observar que a través del patio interior del edificio se veía la ventana del baño de nuestra habitación, La ventana tenia una pequeña rendija por donde después de tantos años recordando aquella foto finalmente la he podido entrever desnuda, primero de espaldas frotándose la piel, luego de costado donde se la veía medio pecho al enjabonarse y finalmente mostrando todo su esplendor mientras se enjuagaba el pelo.
Hacia años que no estaba tan excitado, mi polla se ha puesto a cien, escapandose de mi pantalón y he pensado en masturbarme mientras la via en la ducha, pensando que esa ventana abierta con el hueco justo para verla estaba así por que ella la había dejado así adrede, pero para variar como ocurre siempre en estas situaciones me he encontrado con que no tenia nada con lo que limpiar el rastro que iba a dejar mi polla al correrse en aquella habitacion, así que muy a mi pesar tras unas sacudidas me he tenido que aguantar y volver a guardar la polla en su sitio, frotándome unicamente con la mano por puro instinto apretándome lascivamente la polla, lo que me ha echo explotar finalmente corriéndome encima con los pantalones puestos, y tal ha sido el placer que he sentido que me he tenido que dejar caer sobre la cama extasiado como hacia mucho tiempo que no sentía.
Más tarde ella ha salido del baño, metida en unos vaqueros, y abrochándose la camisa dejando ver sus pezones marcados mientras sobre la tela,mientras me preguntaba si me iba a duchar yo también antes de cenar o luego.
Yo no podía moverme de la cama, aun estaba medio en éxtasis y no podía mostrar la huella del delito que llevaba en los pantalones, así que me dispuse a dilatar el tiempo mientras hablando de una serie de adolescentes que había puesta en la televisión, a lo que hemos empezado a hablar de recuerdos de cuando éramos niños, de los novios y las novietas que tuvimos, de mis recuerdos en la piscina con mis vecinas, de sus recuerdos con el primer chico que le llamo la atención , del primero que vio desnudo, y de cosas de ese estilo, la verdad es que esta bien hablar con una chica de cosas así, me gusta.
El caso es que finalmente he entrado en la ducha, ya más relajado que antes, y me he duchado dejando también la ventana abierta a sabiendas de que la de la habitación se había quedado abierta también, con lo que seguramente ella se diera cuenta y también me miraría.
Y a juzgar por los ruidos que oía del marco de la ventana mientras me duchaba creo que ella miro tambien, creo sin dudas ella ha descubierto el juego también, no se que habrá echo mientras me veía, pero me excita pensar lo que podía estar haciendo mientras yo estaba en la ducha con la polla morcillona que se me queda cuando me corro después de estar tan excitado, e incluso algo mas acentuada en su estado morcillón si cabe por la excitación que me daba el saber que me miraba, intentando no empalmarme para que no se diera cuenta de que era consciente de toda aquella excitante situación.
Quizás tendría que terminar de ducharme y salir en pelotas a cambiarme a la habitación delante de ella como cuando éramos niños, en vez de hacerlo en el propio baño, quizás tendría que ir hacia ella con la polla tiesa para que no hubiera ningún tipo de dudas de lo que quiero, engancharla y tirarla sobre la cama, quizás debería follármela sin mediar palabra como creo que los dos queremos hacer, pero no lo haré, y ella tampoco lo hará, lo se, así que al igual que cuando empezamos a madurar en la niñez los dos nos iremos finalmente a la cama con la excitación y el recuerdo de haber visto al otro desnudo.
¿Por qué? Quizás por que ya no hacemos siempre lo que queremos, quizás por que ya no somos niños.
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